Es importante tener nuestra placa base totalmente protegida, para que nos dure el máximo tiempo y no nos toque sustituirla antes de tiempo. No hacerlo implica encontrarnos con una serie de fallos frecuentes que harán que su vida útil se acorte más de lo que es debido.

Cortocircuitos en la placa base

Si eres aficionado a montar y desmontar componentes en el interior de tu equipo, uno de los mayores peligros son los tornillos que se caen durante el montaje los cuales si caen sobre un chip de la placa base provocará un cortocircuito, de la misma manera que cualquier otro objeto metálico.

Te aconsejamos que mejor esto lo realice un experto, si piensan realizarlo tu mismo checa bien que ningún componente quede suelto antes de cerrar la caja.

Subidas de tensión

Si tenemos una fuente de alimentación de mala calidad, y la red de corriente eléctrica de donde vivimos no es muy buena, es muy posible que, en caso de subida de tensión, nuestra placa base resulte dañada.

Nuestra recomendación es que si tienes una fuente de alimentación de mala calidad y que no tiene protección contra las subidas de tensión, antes de que la placa base se te pueda estropear te recomendamos comprar un UPS con soporte para las subidas de tensión.

Orificios de ventilación sucios

No olvidemos que el polvo es el gran enemigo de los componentes electrónicos y puede provocar un exceso de temperatura dentro de un portátil puede estropear la placa base al deformarla.

El hecho que una placa se deforme por el calor es nefasto, ya que esto no solamente rompe los raíles de cobre para la comunicación y alimentación entre componentes, también puede destrozar los pines de los componentes soldados a la placa.

Por tanto, es imprescindible mantener bien limpias las rejillas de ventilación de nuestro ordenador portátil para aseguraros su larga vida. Por lo que periódicamente te recomendamos abrirlo para hacerle una limpieza con un spray de aire comprimido y un paño para el polvo.